"LA REALIDAD NO EXISTE...NOSOTROS LA CONSTRUIMOS"

Al hablar sobre Nuevas Tecnologías, resulta inevitable que mi mente se remonte a uno de los más populares géneros de la literatura de ficción: la Ciencia-Ficción (Sci-Fi).

Los principales referentes que sobre tecnología que se poseen aparecen en este género literario, conocido también como literatura de anticipación por la capacidad que tiene de narrar el “impacto que producen los avances científicos, tecnológicos (…), presentes o futuros sobre la sociedad o los individuos” e incluso, porque supone una ruptura de la realidad conocida.

Esta “realidad conocida” (sí, entre comillas), es como el famoso título de la obra magistral de Stanley Kubrick: “una Odisea del Espacio”, el 'espacio' entendido como esa "extención continua en que se contienen todos los objetos externos que coexisten" porque en estos tiempos de globalización, en donde las distancias se acortan, se reducen, desaparecen, el término se vuelve más complejo y los nuevos dispositivos tecnológicos de comunicación son capaces de transportarnos a lugares tan remotos y a la vez tan cercanos en una especie de “Realidad Virtual”.

Por este motivo, las Nuevas Tecnologías suponen un cambio, un impacto en nuestro entorno “pero las sociedades están compuestas de individuos y son buenas únicamente en la medida en que los auxilian a realizarse conforme a sus capacidades y a lograr una vida feliz y productiva”.

viernes, 17 de octubre de 2008

La Revolución de la Tecnología de la Información

Lo que Castells (1997) nos transmite en esta lectura, es un vistazo a lo que ha sido el cambio tecnológico. Es un recorrido histórico que comienza con los primeros avances que se dan en los artefactos antiguos como la máquina de vapor, la hilandera, entre otros para hacerlos más funcionales y eficaces para el trabajo hombre-máquina (Revolución Industrial).

Es oportuna esta lectura ya que nos sitúa en el contexto y el tiempo adecuado en el que se empezaron a desarrollar y producir los cambios claves que fueron configurando el actual panorama tecnológico.

Así Castells ya menciona en las primeras páginas que este cambio ocurrió súbitamente a finales del Siglo XX, en el cual se vivió “un nuevo paradigma tecnológico organizado en torno a las tecnologías de la información” (1997, p. 56). Es en este momento cuando nuestro entorno entra en una continua transformación y vemos como día a día van surgiendo nuevos dispositivos que hacen la comunicación más portable.

El autor define a la tecnología como una convergencia de varias ciencias, las cuales facilitan la producción de materiales científicos de una manera reproducible (Castells, 1997). Es la revolución por tanto un nuevo estilo de vida que integra las tecnologías a las actividades diarias, se refiere al procesamiento de la información y comunicación para facilitarnos la vida.
Para llegar a este punto, debemos ubicarnos, en primer lugar en los momentos que marcaron las tecnologías que usamos a diario. Un primer momento se inicio en la Segunda Guerra Mundial cuando los aparatos para la comunicación se vuelven más sofisticados y por si fuera poco, es en este momento que se empieza a gestar el antecedente directo de lo que conocemos como Internet.

Una parte que me parece fundamental de la lectura es la que se refiere al fundamento que caracteriza a la revolución tecnológica, esto es: la aplicación del conocimiento y la información a aparatos de generación y procesamiento de esa información/comunicación, es decir, un circulo de retroalimentación acumulativa entre lo que es la innovación y sus usos (Castells, 1997). Lo que esta revolución propone es crear a partir de la práctica y la práctica a partir de la creación.

Es verdad que la tecnología tiene la facilidad de conectarnos con gente ubicada en cualquier parte del mundo, no importa la distancia ni el tiempo, pero también, tiene la parte selectiva, es decir, los cismas: no todos tienen la capacidad de estar dentro de este nuevo paradigma en el cual si no estás en él (on line), es como si no existieras para los demás, como el autor menciona “las zonas desconectadas son discontinuas cultural y espacialmente” (Castells, 1997, p. 60). El origen de todo esto se da en el cómo sea usada la tecnología por determinado pueblo, mientras unos sólo las usan, otros las usas y crean nuevos avances para poderla entenderlas, caracterizado siempre por un entorno propicio para que esas innovaciones se hagan realidad, como la infraestructura, el conocimiento y sobre todo, la materia prima, las personas; el factor económico es importantísimo, no hay que perder de vista que en la actualidad lo tecnológico es lo que recauda más ganancias, como muestra, Bill Gates. Por lo anterior y por más la tecnología “no es un acontecimiento aislado” (Castells, 1997, p. 63).

La revolución tecnológica ha traído consigo la gran penetración de su uso en diferentes disciplinas y campos científicos, en determinados momentos de la historia este acceso se dio a la par, por poner como ejemplo tenemos a la genética, uno de los campos de la biotecnología, en el cual ha sido posible la clonación de varias especies animales gracias al descubrimiento de “la unión de los genes y la recombinación del ADN, la base teórica de la ingeniería genética, cuajó en la forma de conocimiento acumulativo” (Castells, 1997, p. 74), momento en el que también se inicia la carrera por la comercialización de los grandes laboratorios químicos y de las universidad por tener la patente de una información tan valiosa.

Hay en la lectura un apartado destinado a la secuencia histórica de la revolución tecnología de la información, en esta parte el autor nos describe muy bien las etapas, menciona que el periodo subsiguiente y durante la Segunda Guerra Mundial es cuando se dan los primeros avances tecnológicos en la electrónica, es cuando surge el transistor y el primer ordenador programable, sin embargo, el gran salto ocurrió hasta el año de 1971 con la invención del microprocesador, hasta que finalmente llegó el chip que ofreció con el tiempo su adaptación a diversos aparatos con los cuales convivimos a diario como la lavadora, el lavavajillas, el horno de microondas, entre otros. Aquí encontramos también la historia de la edificación de los dos mega corporativos que existen en la actualidad: la compañía Apple y Microsoft.

En suma, el recuento que hace Castells resulta ilustrativo y comprensible, me gustó la forma que tiene de redactar y de ir sumergiendo al lector en el mundo de la revolución tecnológica, me parece una lectura que puede leer cualquier persona que no esta familiarizada con los conceptos ya que el autor maneja un lenguaje claro.

Lo que me queda es una visión más amplia del cómo se han configurado los avances tecnológicos con los que convivo a diario, que estos avances no son aislados, que dependen en gran medida de la sociedad que les dio vida, que en la mayoría de los casos suelen ser centros multiculturales, y que todo está inmerso en el paradigma económico, todo es redituable y los dispositivos son cada día más cotizados por la razón de que se les ha agregado el prefijo de “nuevos”, lo que significa para los usuarios más asiduos, estar al día y tener el artefacto que les asegurará una escala más entre sus amistades.

Castells, M. (1997). La revolución de la tecnología de la información. En la era de la información (55-92), (Vol. 1 la sociedad red). España: Alianza.

2 comentarios:

Edras dijo...

hola, pues me pareció excelente que usaras la citación de apa, miralo quien te viera, tan inteligente, que barbara, también me gustó que en tu comentario te expresaras de esta forma, tan característica tuya.

Amiga muy bonito todo la verdad, muy fuerte muy intensa.

Nuevas Tecnologías dijo...

Es muy extenso el análisis, y recuperas información importante del texto