“Welcome to the desert of the real”
A continuación narro mi experiencia al leer el libro de la muerte del ciberespacio: despertando de las metáforas consensuadas de Edgar Gómez Cruz en el cual nos habla sobre los diversos discursos que se han generado acerca de Internet.
Estos discursos llamados en el libro “metáforas” son las que han generado hasta un cierto punto una coyuntura en el momento de establecer y unificar el concepto de Internet y todo lo que en ella convergen sin embargo, como bien menciona Edgar Gómez (2007) son “puntos de paso obligados” no solo para el desarrollo y realización del libro, sino para cualquier acercamiento que se le haga al tema.
Concuerdo con Edgar Gómez (2007) cuando menciona que Internet “parece haberse convertido en un metadiscurso” (p. 2) en el cual se busca una explicación a la gran variedad de actividades, practicas y relaciones que se generan al cruzar por ella, es decir, darnos cuenta (despertar) de que Internet no es el “monolito sólido” que se creyó por mucho tiempo sino un medio flexible de profundos y continuos cambios.
Ha existido una gran variedad de metáforas como de discusiones porque es el término de ciberespacio presenta las mismas características, tienen en común esas ambigüedades de ser al mismo tiempo un espacio físico pero a la vez, imaginado.
Es con esta complejidad que da inicio el libro, el cual es un recorrido histórico dividido en tres partes: la 1ª dedicada al concepto de ciberespacio; 2º al de comunidad virtual y 3º sobre la identidad virtual.
Sostengo que los avances tecnológicos nacieron a partir de la literatura de Ciencia Ficción, siempre lo he sospechado y dicho, en la cual los escritores demostraron ser visionarios al momento de imaginar “mundos” o posibles “realidades” a partir de la fusión de máquinas con hombres y el de incluir el carácter robótico y cibernético a sus historias, entonces, con la lectura de Gómez Cruz encuentro el respaldo a esta muy personal aseveración, cuando dice que el término ciberespacio es herencia directa del cyberpunk (subgénero de la CF) en la famosa novela de William Gibson Neuromancer.
El concepto de ciberespacio es una metáfora de que lo tangible se vuelve intangible y lo intangible tangible, con esto quiero decir que, a lo que nosotros sabemos que es el “espacio”, ese gran espectro que no vemos físicamente (a excepción del geográfico) pero en el cual realizamos nuestras actividades se vuelve materia para darle paso al “ciber”, el cual es lo inmaterial, la simulación.
En esta simulación entra en juego la “virtualidad” o “Realidad Virtual” generando la inmersión, es decir, la creencia de los usuarios de vivir en esas realidades inventadas.
El libro aunque denso en contenido me pareció oportuno por el viaje histórico por el que nos lleva y por plantearnos el “vacío” en el que nos encontramos al no poseer un lenguaje consensuado con relación a Internet, al igual de todas las acciones que se generan a partir de él.
Finalmente apoyo al autor cuando dice que el libro es un intento por analizar las metáforas al aportar una crítica constructiva en lo referente a la investigación que se ha producido en torno a ellas. Siento que el libro no va más allá que eso, sin embargo es importante su lectura para darnos cuenta que la misma emergencia mediática-tecnológica nos generó una especie de ceguera intelectual que nos impedía ver que en torno a ella, se creaban nuevas formas de convivencia, para mí nuevos mundos con un nuevo idioma, el cual se quedo en segundo plano para ponderar y ensalzar las capacidades inmersibas con las que cuenta el ciberespacio.
A continuación narro mi experiencia al leer el libro de la muerte del ciberespacio: despertando de las metáforas consensuadas de Edgar Gómez Cruz en el cual nos habla sobre los diversos discursos que se han generado acerca de Internet.
Estos discursos llamados en el libro “metáforas” son las que han generado hasta un cierto punto una coyuntura en el momento de establecer y unificar el concepto de Internet y todo lo que en ella convergen sin embargo, como bien menciona Edgar Gómez (2007) son “puntos de paso obligados” no solo para el desarrollo y realización del libro, sino para cualquier acercamiento que se le haga al tema.
Concuerdo con Edgar Gómez (2007) cuando menciona que Internet “parece haberse convertido en un metadiscurso” (p. 2) en el cual se busca una explicación a la gran variedad de actividades, practicas y relaciones que se generan al cruzar por ella, es decir, darnos cuenta (despertar) de que Internet no es el “monolito sólido” que se creyó por mucho tiempo sino un medio flexible de profundos y continuos cambios.
Ha existido una gran variedad de metáforas como de discusiones porque es el término de ciberespacio presenta las mismas características, tienen en común esas ambigüedades de ser al mismo tiempo un espacio físico pero a la vez, imaginado.
Es con esta complejidad que da inicio el libro, el cual es un recorrido histórico dividido en tres partes: la 1ª dedicada al concepto de ciberespacio; 2º al de comunidad virtual y 3º sobre la identidad virtual.
Sostengo que los avances tecnológicos nacieron a partir de la literatura de Ciencia Ficción, siempre lo he sospechado y dicho, en la cual los escritores demostraron ser visionarios al momento de imaginar “mundos” o posibles “realidades” a partir de la fusión de máquinas con hombres y el de incluir el carácter robótico y cibernético a sus historias, entonces, con la lectura de Gómez Cruz encuentro el respaldo a esta muy personal aseveración, cuando dice que el término ciberespacio es herencia directa del cyberpunk (subgénero de la CF) en la famosa novela de William Gibson Neuromancer.
El concepto de ciberespacio es una metáfora de que lo tangible se vuelve intangible y lo intangible tangible, con esto quiero decir que, a lo que nosotros sabemos que es el “espacio”, ese gran espectro que no vemos físicamente (a excepción del geográfico) pero en el cual realizamos nuestras actividades se vuelve materia para darle paso al “ciber”, el cual es lo inmaterial, la simulación.
En esta simulación entra en juego la “virtualidad” o “Realidad Virtual” generando la inmersión, es decir, la creencia de los usuarios de vivir en esas realidades inventadas.
El libro aunque denso en contenido me pareció oportuno por el viaje histórico por el que nos lleva y por plantearnos el “vacío” en el que nos encontramos al no poseer un lenguaje consensuado con relación a Internet, al igual de todas las acciones que se generan a partir de él.
Finalmente apoyo al autor cuando dice que el libro es un intento por analizar las metáforas al aportar una crítica constructiva en lo referente a la investigación que se ha producido en torno a ellas. Siento que el libro no va más allá que eso, sin embargo es importante su lectura para darnos cuenta que la misma emergencia mediática-tecnológica nos generó una especie de ceguera intelectual que nos impedía ver que en torno a ella, se creaban nuevas formas de convivencia, para mí nuevos mundos con un nuevo idioma, el cual se quedo en segundo plano para ponderar y ensalzar las capacidades inmersibas con las que cuenta el ciberespacio.
Gómez Cruz, E. (2007). La muerte del ciberespacio: despertando de las metáforas consensuadas. Barcelona: UOC